domingo, 9 de septiembre de 2012

Competencias profesionales de comunicadores/as y comunicólogos/as


Establecer asociaciones (negociar, cimentar la confianza), colaborar, crear vínculos

La creación de redes interinstitucionales (líderes de base, instituciones, asociaciones, universidades, sector público, gremios empresariales etc.) es uno de los retos más ambiciosos de un comunicador especializado en la comunicación para el desarrollo. Parte del planteamiento de la estrategia de comunicación lo establece como uno de los objetivos específicos más importantes por más de una razón. Se suele tardar mucho tiempo en llegar a conocer y establecer contacto con los líderes de base, debido a varias razones una de ellas puede ser la credibilidad del proyecto a ejecutar y la poca permeabilidad de la comunidad para hacerse del tema.

Otra razón, tal vez más burocrática, puede ser cuando las instituciones tardan en establecer sus portavoces para determinados temas de interés de la comunidad. O en el fondo no están interesados en tenerlos pero saben que deben cumplir con los requisitos para lograr alianzas estratégicas.
En ese sentido, el trabajo del comunicador hace uso de aquellas habilidades innatas que debe tener, como el observar, saber escuchar e investigar a fin de crear puentes de confianza que sin ellos, no se podría consolidar la estructuración de las redes interinstitucionales y sociales deseables. Ello parte además, de la capacidad del proyecto a emprender, de colaborar con ciertas acciones de interés de la comunidad que redundarán en construir la imagen de apertura necesaria para fortalecer los lazos de confianza entre las partes y lograr en un mediano plazo los objetivos trazados en el plan de comunicación. 
 

sábado, 25 de agosto de 2012

Competencias profesionales de comunicadores/as y comunicólogos/a

Motivar, movilizar, comprometer a la gente


Ya en la acción misma del plan de comunicación establecido, cuando los objetivos generales ya están planteados y quedan el cumplimiento de los objetivos específicos, el comunicador tiene el rol primordial de enfocarse en establecer y mantener de manera continua un eje motivador, movilizador y de compromiso con la gente o público destinatario, a fin de promover el cambio buscado.
Se diría que es la parte más activa de todo el plan de comunicación o campaña de comunicación y a su vez la que está más llena de riesgos y retos, dado que la motivación debe estar muy alta en el grupo de comunicación para transmitirla adecuadamente.
La manera de comprometer a la gente se entiende como la forma de convocarlos a participar de las actividades de comunicación que se plantean en las tácticas y herramientas que componen el plan de comunicación.
En muchos casos puede ser la participación de talleres de capacitación con la presencia de expertos, campañas de movilización que pueden darse en distintos formatos como caminatas, marchas, mítines, campañas de sensibilización con acciones para bien de la comunidad como plantar arbustos, reciclar o hasta organizar festivales. Todo esto dependiendo del espíritu de los objetivos establecidos y de las herramientas comunicativas que se hayan propuesto en el plan. 

sábado, 11 de agosto de 2012

Las competencias profesionales de comunicadores/as y comunicólogos/a


Relacionarse e identificar con la gente, comunicar y trabajar a través de las culturas

En la búsqueda por establecer los canales de comunicación adecuados para involucrarse con el contexto a intervenir, el comunicador cumple el papel de mediador entre la gente y el gestor del proyecto comunicativo (proyecto de cooperación). El comunicador encuentra en la identidad con la gente o público destinatario, la manera de trabajar utilizando como herramienta sus propias armas culturales y las adyacentes.
Una manera de graficarlo podría ser, cuando un comunicador se plantea la estrategia de sensibilizar a una comunidad ´cerrada´ donde, por ejemplo, no hay espacios públicos accesibles para las personas con discapacidad, y existe la importancia de construir los espacios accesibles para que aquellas personas puedan transitar con seguridad por las calles y así sentirse incluidas y aceptadas por su propia comunidad. 
La manera de identificarse con este colectivo es primordial, primero para que el propio comunicador se sensibilice desde su perspectiva de no discapacitado como si lo fuera, y desde la perspectiva de quien busca establecer relaciones de solidaridad (el cooperante, la empresa, la fundación, etc) para hacer suyo un concepto de vida, que para muchos es ajeno. 
La cultura de la solidaridad entonces, viene a ser el medio para llegar a quienes viven ajenos a este contexto social pero, saben que más temprano que tarde, lo vivirán. La cultura de la reciprocidad en este caso se manifiesta en la manera de abordar la forma de comunicar y trabajar a través de estas culturas que por nuevas, son poco relevantes o poco visibles para muchas otras comunidades en diversos lugares del planeta.

 

domingo, 29 de julio de 2012

Las competencias profesionales de comunicadores/as y comunicólogos/a


Comprender al público destinatario, informarse sobre el contexto / la cultura, analizar la situación



El comunicador debe tener la capacidad de interesarse por el entorno en el que vive en tanto y en cuanto, en el público al que van dirigidos sus mensajes. Es una condición sine cuanon, de cualquier profesional de las ciencias de la comunicación, contar con la habilidad y destreza de saber interpretar el contexto en el que vive su receptor (público, destinatario, público objetivo, agentes de cambio, colectivo, o como sea definido para el caso).
Conocer de primera mano su cultura para luego hacer un primer análisis aproximativo de su forma de ser y de pensar y de comportarse de acuerdo a las pautas ya establecidas en su entorno.
Una forma de informarse sobre el contexto y la cultura en la que vive ese público destinatario, debiera ser su dialogo cotidiano sobre los temas de actualidad que se suelen hablar en los espacios públicos en donde todos convergemos (puestos de periódicos, mercados, paradas de autobús, tiendas de alimentos, etc.).
De ahí la importancia de que el comunicador, cuente con aquella destreza que le permita estar siempre atento a todo tipo de comunicación: comunicación verbal y no verbal, gestual y no gestual, que se denota cuando el individuo se involucra en temas de interés público de su comunidad.

domingo, 8 de julio de 2012

Las competencias profesionales de comunicadores/as y comunicólogos/a

Usar métodos participativos, dar a las comunidades una voz


La tarea del comunicador no solo se limita a emitir mensajes eficaces con una buena redacción y oralidad, cada vez es de mayor relevancia promover que sean los propios públicos específicos o las comunidades, los que lleven la voz de sus representantes.
Desde una perspectiva democrática y de inclusión a todas y todos los miembros de la sociedad, los comunicadores tienen la capacidad de aplicar métodos participativos de comunicación en las comunidades a fin de lograr un par de objetivos invalorables: lograr que la voz de los individuos sea oída por los demás y conocer en primer lugar cómo se manifiestan sus identidades a través de sus sensaciones, miedos, preocupaciones, anhelos e intereses.
Y también, hacer que la comunidad logre convertirse en agente de cambio para los fines de su bienestar y mejoramiento de su calidad de vida, en el marco de los proyectos de desarrollo. Creo que los métodos participativos promueven una cultura de involucramiento que antes no existía. Ahora es una herramienta valiosa que ayuda a los pequeños colectivos a dar a conocer sus ideas promoviendo su participación en muchas más acciones de interés común.
Lo cual redunda beneficiosamente en el uso de las buenas prácticas democráticas que en muchos casos es reconocida, principalmente entre colectivos que se encuentran desconectados de las grandes urbes o son poblaciones poco accesibles para el acceso a la información, pero que constituyen un valor para su causa.