Establecer asociaciones (negociar, cimentar la confianza), colaborar, crear vínculos
La creación de redes interinstitucionales (líderes de base, instituciones, asociaciones, universidades, sector público, gremios empresariales etc.) es uno de los retos más ambiciosos de un comunicador especializado en la comunicación para el desarrollo. Parte del planteamiento de la estrategia de comunicación lo establece como uno de los objetivos específicos más importantes por más de una razón. Se suele tardar mucho tiempo en llegar a conocer y establecer contacto con los líderes de base, debido a varias razones una de ellas puede ser la credibilidad del proyecto a ejecutar y la poca permeabilidad de la comunidad para hacerse del tema.
Otra
razón, tal vez más burocrática, puede ser cuando
las instituciones tardan en establecer sus portavoces para determinados temas
de interés de la comunidad. O en el fondo no están interesados en tenerlos pero
saben que deben cumplir con los requisitos para lograr alianzas estratégicas.
En
ese sentido, el trabajo del comunicador hace uso de aquellas habilidades
innatas que debe tener, como el observar, saber escuchar e investigar a fin de
crear puentes de confianza que sin ellos, no se podría consolidar la
estructuración de las redes interinstitucionales y sociales deseables. Ello
parte además, de la capacidad del proyecto a emprender, de colaborar con
ciertas acciones de interés de la comunidad que redundarán en construir la
imagen de apertura necesaria para fortalecer los lazos de confianza entre las
partes y lograr en un mediano plazo los objetivos trazados en el plan de comunicación.